En este artículo aprenderás acerca de la importancia de iniciar una rutina de higiene oral aún cuando su primer diente no haya erupcionado.

Durante nuestras consultas de odontopediatría, hemos evidenciado que existen algunos mitos sobre el momento en el cual debe implementarse una rutina de Higiene Bucal en los bebés; algunas personas creen que debe iniciarse luego de que sale el primer diente, a partir de los 2 años de edad, o después de la lactancia. 

¿Cuándo iniciarla?

Aún cuando tu bebé no tenga dientes, desde su nacimiento debes retirar los residuos de leche materna o de fórmula pues en muchas ocasiones estos se quedan en los rodetes gingivales (parte la encía donde erupcionan los dientes), la lengua y sus mejillas, provocando un nata blanca (como la del café con leche) que puede causar infecciones y malos olores en su boca.

Así mismo, iniciar una rutina de higiene oral desde temprana edad va instaurando en tu bebé el hábito de su cuidado dental a futuro.

Dedal de silicona*Limpieza con dedal de silicona

Y ¿Cómo lo hago?

1. Lava tus manos con agua y jabón o desinféctalas con gel antibacterial.

2. Siéntate y pon tu bebé en tus piernas, cerca de tu pecho; así él estará boca arriba y tendrás una visión de toda su boca.

3. Toma una gasa o dedal de silicona, ponlo en tu dedo y humedécelo con agua. Evita usar algodón pues este puede dejar residuos en la boca de tu bebé.

4. Pon el dedo sobre la boca de tu bebé y limpia la lengua, la parte interior de los cachetes (carrillos), rodetes gingivales y la parte superior de las encías.

Recuerda realizar este proceso mínimo dos veces al día (importante que la última sea antes de acostarse o dormir en la noche)

Si tienes dudas sobre cómo implementar una rutina de higiene oral con tu bebé y aún no ha tenido su primera cita de revisión, haz clic aquí y agéndala con una de nuestras especialistas.